Las baterías de automóvil «normales» y las baterías «Start-Stop» son diferentes en términos de diseño, tecnología y función, específicamente adaptadas para satisfacer las necesidades de distintos sistemas de arranque y funcionamiento de vehículos.

Baterías Normales:

• Las baterías convencionales se utilizan en vehículos que no cuentan con sistemas Start-Stop o de parada y arranque automáticos.
• Estas baterías están diseñadas principalmente para proporcionar la energía necesaria para arrancar el motor y alimentar los sistemas eléctricos del vehículo cuando está en funcionamiento.
• Son construidas para una descarga lenta y para proporcionar una corriente constante durante períodos más largos.
• Las baterías normales son menos costosas en comparación con las baterías Start-Stop.

Baterías Start-Stop:

• Las baterías Start-Stop están diseñadas para vehículos con sistemas de parada y arranque automáticos, donde el motor se apaga temporalmente cuando el automóvil se detiene y se reinicia automáticamente cuando se presiona el pedal del acelerador.
• Estas baterías están optimizadas para manejar ciclos de carga y descarga más frecuentes y bruscos, ya que se activan con mayor frecuencia debido al funcionamiento del sistema Start-Stop.
• Tienen una mayor capacidad de ciclo, lo que significa que pueden soportar un mayor número de ciclos de carga y descarga.
• Suelen tener una construcción diferente, utilizando tecnologías como AGM (Absorbent Glass Mat) o EFB (Enhanced Flooded Battery), que les permiten ofrecer un rendimiento más adecuado para los requisitos de los vehículos con sistemas Start-Stop.

En resumen, las baterías Start-Stop están diseñadas específicamente para adaptarse a la mayor demanda de energía y a los ciclos de carga y descarga más frecuentes asociados con los vehículos equipados con sistemas de parada y arranque automáticos, mientras que las baterías convencionales son más adecuadas para vehículos sin esta tecnología.

¿Cómo funciona una Baterías Start-Stop?

Las baterías Start-Stop están diseñadas para vehículos con sistemas de parada y arranque automáticos, donde el motor se apaga temporalmente cuando el automóvil se detiene, como en un semáforo o en el tráfico, y se reinicia automáticamente cuando el conductor levanta el pie del freno o presiona el pedal del acelerador. Estas baterías están especialmente adaptadas para manejar los ciclos de arranque frecuentes asociados con este sistema.

El funcionamiento básico de una batería Start-Stop implica varios elementos:

1. Mayor capacidad de ciclo: Las baterías Start-Stop están diseñadas para soportar un mayor número de ciclos de carga y descarga en comparación con las baterías convencionales. Esto significa que pueden arrancar el motor repetidamente sin perder su capacidad rápidamente.
2. Tecnología de la batería: Algunas baterías Start-Stop utilizan tecnologías específicas, como las baterías de plomo-ácido con fibra de vidrio absorbente (AGM) o las baterías de plomo-ácido mejoradas (EFB), que están diseñadas para ofrecer un rendimiento más óptimo en vehículos con sistemas Start-Stop. Estas tecnologías permiten una mejor resistencia a la descarga profunda y una mayor capacidad de recuperación.
3. Sistema de gestión de la batería: Los vehículos con función Start-Stop suelen contar con un sistema de gestión de la batería que monitorea y controla la carga de la batería. Este sistema ajusta la potencia eléctrica según las necesidades del vehículo y puede decidir si es apropiado apagar el motor para ahorrar combustible y reducir las emisiones.
4. Funcionamiento del sistema Start-Stop: Cuando el vehículo se detiene y el sistema Start-Stop está activo (como en un semáforo), la batería suministra la energía necesaria para mantener los sistemas eléctricos esenciales activos, como las luces o el equipo de audio. Cuando el conductor pisa el freno o detiene completamente el vehículo, el motor se apaga para ahorrar combustible. Cuando se levanta el pie del freno o se presiona el acelerador, el motor se reinicia rápidamente, generalmente con la ayuda de la batería Start-Stop.

¿Un coche con start stop necesita una batería agm?   

No necesariamente todos los coches con sistema Start-Stop necesitan una batería AGM (Absorbent Glass Mat). Sin embargo, muchos vehículos equipados con sistemas Start-Stop utilizan baterías con tecnología AGM o EFB (Enhanced Flooded Battery) debido a las demandas específicas de este sistema.

Las baterías AGM y EFB están diseñadas para manejar mejor los ciclos de carga y descarga frecuentes, así como las demandas eléctricas adicionales de los vehículos con sistema Start-Stop. Estas baterías ofrecen una mayor resistencia a la descarga profunda y una capacidad mejorada para manejar la demanda de energía durante los arranques repetidos del motor.

Si tienes un vehículo con sistema Start-Stop, es importante consultar el manual del propietario o buscar la especificación de batería recomendada por el fabricante del automóvil. En muchos casos, el fabricante recomendará el tipo de batería específico que se adapta mejor a las necesidades del vehículo y su sistema eléctrico, lo que puede incluir baterías AGM o EFB.

En resumen, aunque no todos los coches con sistema Start-Stop necesitan obligatoriamente una batería AGM, es común que los vehículos equipados con este sistema se beneficien de una batería diseñada para manejar las exigencias de arranque frecuente y las necesidades eléctricas adicionales que implica el funcionamiento del sistema Start-Stop. Es importante seguir las recomendaciones del fabricante del vehículo para seleccionar la batería adecuada.

¿Cómo cambiar la batería de un coche start-stop?     

El proceso para cambiar la batería de un automóvil con sistema Start-Stop es bastante similar al cambio de una batería convencional, pero puede requerir algunos pasos adicionales debido a las especificaciones técnicas y las necesidades de la batería AGM o EFB utilizada en estos vehículos. Aquí tienes una guía general para cambiar la batería de un coche con sistema Start-Stop:

Materiales necesarios:

• Nueva batería compatible con tecnología AGM o EFB y adecuada para tu vehículo.
• Llave inglesa o juego de llaves.
• Guantes de trabajo (opcional pero recomendable).
• Gafas de seguridad (opcional pero recomendable).

Pasos para cambiar la batería:

1. Apagar el motor y los accesorios: Asegúrate de que el motor esté apagado y todos los accesorios eléctricos estén desactivados.
2. Localiza la batería: La batería del automóvil suele encontrarse bajo el capó. Consulta el manual del propietario para localizarla si no estás seguro.
3. Desconecta los terminales: Utiliza una llave para aflojar y desconectar primero el terminal negativo (-) y luego el positivo (+) de la batería. Este orden de desconexión es crucial para evitar cortocircuitos.
4. Retira la batería antigua: Afloja los sujetadores de la batería y retira los soportes que la mantienen en su lugar. Levanta la batería antigua con cuidado.
5. Limpia la bandeja de la batería: Si la bandeja está sucia o corrosiva, límpiala con bicarbonato de sodio y agua para neutralizar cualquier ácido que pueda haberse derramado.
6. Instala la nueva batería: Coloca la nueva batería en la bandeja y vuelve a asegurar los soportes. Asegúrate de que esté firmemente asegurada.
7. Conecta los terminales: Conecta primero el terminal positivo (+) y luego el negativo (-). Asegúrate de apretar bien las conexiones.
8. Verifica la instalación: Asegúrate de que la batería esté firmemente asegurada y que los terminales estén conectados correctamente.
9. Enciende el motor: Una vez que la nueva batería está instalada, enciende el motor para asegurarte de que todo funcione correctamente.

Recuerda seguir las especificaciones del fabricante del vehículo y las recomendaciones para la batería específica requerida por tu automóvil con sistema Start-Stop. Si no te sientes seguro realizando este procedimiento, es recomendable buscar ayuda profesional o llevar el vehículo a un taller mecánico.